BOLETÍN DIGITAL No. 498 LA PARTICIPACIÓN ACTIVA DE LA MUJER
LA PARTICIPACIÓN ACTIVA DE LA MUJER
‒ Aniversario de la primera emisión del voto femenino ‒
La presencia de la mujer y su participación en la sociedad ha tenido avances gigantescos. Así se capta en nuestra realidad diocesana: “ha habido significativamente más presencia activa de la mujer en grupos, movimientos, organizaciones y partidos políticos, además de que se tiene un mayor reconocimiento de sus derechos y de la valoración de su ser mujer” (Marco de realidad n° 40). Todo un cambio cultural impulsado por las reformas que se han realizado a la Constitución. En esta ocasión, se resalta su derecho al voto.
Trascurría el 3 de julio de 1955 cuando, por primera vez, las mujeres mexicanas acudieron a las urnas a emitir su voto, para elegir a los diputados federales de la XLIII Legislatura. Todo un acontecimiento interpretado como uno de los mayores reconocimientos a sus derechos. Hoy celebramos el 67 aniversario de este hecho que vino a enriquecer y a fortalecer el camino hacia la democracia en nuestro país.
Antes, en 1937, se había lanzado la iniciativa de reforma al artículo 34 de la Constitución mexicana, solicitando por primera vez el derecho a la mujer a votar y obtener cargos de elección popular sin un final feliz, sino hasta el 17 de octubre de 1953 cuando se promulgaron las reformas constitucionales. Así, el 4 de julio de 1954 se eligió a la primera diputada federal en la historia de México (cfr. CNDH, Primera vez que la mujer vota en México).
Jesús le apostó a la capacidad de la mujer. Durante su ministerio, no solo se dejó acompañar por las mujeres, sino que las hizo discípulas suyas, algo insólito para su tiempo: “Iban con él también algunas mujeres que había liberado de malos espíritus” (Lc 8,2). Además, confió a la mujer asuntos trascendentales como el anuncio de su propia resurrección: “Jesús le dijo a María Magdalena: ve y di a mis hermanos que voy a mi Padre” (Jn 20, 17).
Hoy en nuestros días la presencia de la mujer en cargos públicos es una realidad incuestionable y forma ya parte de nuestra cultura política. Alcanzar este espacio ha costado mucho. El “genio femenino” tiene mucho que aportar en el mejoramiento de la sociedad hacia la justicia, la verdad y la paz, pero no con ideologías, sino con hechos concretos.
P. Florentino Lucas Valdez, Párroco.
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