BOLETÍN DIGITAL No. 487 OCHO DÍAS SOLEMNES DE ALEGRÍA DESBORDADA
OCHO DÍAS SOLEMNES DE ALEGRÍA DESBORDADA
-- La Octava de Pascua--
Hoy la Iglesia celebra, en todo el mundo, el triunfo del Señor sobre la muerte, trayéndonos de esta manera la esperanza de la resurrección y la salvación. Jesús que, habiendo cargado el peso de todos nuestros pecados en el madero de la cruz, supo regresar triunfante con su resurrección y, de esta forma, sellar con broche de oro su amor y misericordia por nosotros. La gran noticia es que Cristo triunfó sobre la muerte y nos abrió las puertas del cielo.
Cristo Resucitado llega a ser consuelo este año por los acontecimientos que actualmente golpean nuestro planeta. Por un lado, la pandemia aún sigue haciendo eco y nuevamente acecha algunos países que ya se encuentran en cuarentena; por el otro, la guerra de Rusia contra Ucrania que aún no cesa. En nuestro país, el alza de precios de los productos básicos.
Con el domingo de Resurrección comienza los cincuenta días del tiempo pascual que concluye en Pentecostés. A la primera semana de este tiempo litúrgico se le llama la Octava de Pascua, que es la celebración continuada de la resurrección de Jesús durante ocho días, como si fuera un único día de fiesta, como si fuera un largo Domingo.
En el Antiguo Testamento, el pueblo de Israel celebraba sus grandes fiestas durante ocho días como la de los Tabernáculos, ázimos y Pascua, de las cuales el día octavo era el más solemne (Lev 23, 34-36). Sobre la resurrección de Jesús, se nos trasmite que “el primer día después del sábado, muy de mañana, llegaron las mujeres al sepulcro y no hallaron el cuerpo del Señor Jesús” (Lc 24, 1.3), era el domingo, el día después del séptimo día de la semana judía.
“La Iglesia, desde la tradición apostólica que tiene su origen en el mismo día de la resurrección de Cristo, celebra el misterio pascual cada ocho días, en el día que se llama con razón día del Señor' o ‘domingo’. El día de la Resurrección de Cristo es a la vez el ‘primer día de la semana’, memorial del primer día de la creación, y el ‘octavo día’ en que Cristo, tras su reposo del gran Sabbat, inaugura el que no conoce ocaso” (Catic n° 1166).
Las apariciones de Jesús que escucharemos en la Octava de Pascua nos estimulan a recorrer el itinerario de fe de quienes se encontraron con Cristo. ¡Feliz pascuas de la Resurrección!
Alondra Lizeth Sosa Hernández, Integrante de la Pastoral de la Comunicación.
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