BOLETÍN DIGITAL No. 479 VALENTÍA Y FORTALEZA EN LA ADOLESCENCIA

VALENTÍA Y FORTALEZA EN LA ADOLESCENCIA

--San José Sánchez del Río--

Algunos jóvenes “son influenciados por la cultura de cristal”, así lo afirma el marco de realidad diocesano en el n° 122. ¿Qué significa “generación de cristal”? Son los jóvenes nacidos del 1995 al 2000 y “que tienen una vida económica estable, acceso a educación, tienen seguridad, pero emocionalmente son frágiles, se rompen ante las adversidades, no aceptan el rechazo y las realidades negativas que existen” (Literal, periodismo ciudadano, Generación de cristal y cultura de cancelación ¿de qué van estos términos?).

El pasado 10 de febrero celebramos al santo mexicano San José Sánchez del Río, el niño cristero que murió mártir en la persecución religiosa. En 1926, cuando las leyes anticlericales del gobierno de Plutarco Elías Calles llevaron a que la Iglesia católica suspendiera el culto público, “Joselito” tenía apenas 13 años. Pidió permiso a sus padres para enlistarse como soldado del general Prudencio Mendoza y para convencerlos dijo: “nunca había sido tan fácil ganarse el cielo como ahora, y no quiero perder la ocasión”.

José fue capturado, lo torturaron, le hicieron unas heridas en las plantas de los pies y lo condujeron por las calles empedradas hasta el cementerio. En la zona de la fosa común, lo invitaron a renegar de su fe y gritar “viva el supremo gobierno” para salvar su vida; pero él gritó: “¡Viva Cristo Rey! ¡Viva la Virgen de Guadalupe!”. Le dieron un golpe en la cara con la culata de un máuser, cayó al suelo y lo acuchillaron en el pecho, piernas y brazos. 

En su agonía logró balbucear: “Viva Cristo Rey”. Uno de los ejecutores desenfundó su pistola y le disparó en la cabeza, detrás de la oreja derecha (cfr. Religión en libertad, “Mártir con 14 años, José Sánchez del Río es modelo de valentía y fortaleza para los jóvenes de hoy”). Fue declarado beato, en Guadalajara, el 20 de noviembre de 2005 y canonizado en Roma por el Papa Francisco el 16 de octubre de 2016. 

La valentía y fortaleza de San José Sánchez del Río son un ejemplo para encender la audacia y arrojo que todo adolescente lleva en su corazón, que los puede llevar a alcanzar grandes hazañas en bien del prójimo: “cuando soy más débil, soy más fuerte” (II Cor 12,10). 

Claudia Elizabeth Pérez de la Cruz, Coordinadora de la Pastoral de la Comunicación. 


Comentarios

  1. A mucha honra VIVA ❤️CRISTO REY❤️ hasta nuestro último suspiro😍😍😍

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