BOLETÍN DIGITAL No. 463 DÍA DE MUERTOS

DÍA DE MUERTOS

-- Celebración, cultura y tradición --

Apenas terminaba el mes patrio y en las redes sociales ya circulaban imágenes y textos que enfatizaban la llegada del mes en el que se disfruta el delicioso chocolate, pan de muerto y los riquísimos tamales de varios sabores y, con esto, la llegada del mes de la fiesta de los fieles difuntos, un mes muy alegre, pero sobre todo lleno de sentimientos entre las familias, pues, es el segundo año que la celebramos en medio de esta pandemia.

Esta fiesta mexicana se distingue por varios aspectos, únicos en el mundo, por ejemplo, aquellos arcos de madera, palmas y/o carrizos, adornados con flores y frutas, que forman el tradicional y famoso altar de muertos, donde se colocan veladoras, comida, dulces y decorados con colores alegres e imágenes que traen a la memoria a nuestros familiares y amigos ya difuntos que se han marchado, y así pasará a formar parte de la Iglesia purgante.

Según la tradición, en el día de muertos las ánimas comparten un momento con los seres vivos ofrendas y oraciones, en la que pedimos a Jesucristo por el descanso de sus almas. El papa Francisco en un tweet compartió “Jesús le ha quitado a la muerte la última palabra” pues asegura que “todo el que cree en Él será transfigurado por el amor misericordioso del Padre para vivir una vida eterna y feliz” (Papa Francisco 2018).

En esta fiesta también recordamos que en algún momento partiremos de esta vida, pero es el mismo Jesús quien afirma “Yo soy la resurrección y la vida, el que cree en mí aunque muera vivirá; y todo aquel que esté vivo y crea en mí jamás morirá” (Jn 11, 25-26). Con estas palabras estamos seguros que Jesús promete una vida más allá de la muerte, que nos regalará la dicha de formar parte de la Iglesia triunfante. 

Es necesario redescubrir el sentido y el valor de la vida en nuestra Iglesia peregrinante, pues es aquí donde hacemos obras buenas por alcanzar la salvación. También es la oportunidad para rescatar las tradiciones de nuestros antepasados, para que en estas fechas celebremos no fiestas paganas, sino podamos celebrar lo nuestro. Para los que se han adelantado, concédeles Señor el descanso eterno y brille para ellos la luz perpetua. ¡Que así sea!   

Francisco Javier Guillermo Pérez, Integrante de la Pastoral de la Comunicación.


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