BOLETÍN DIGITAL No. 436 “EL PAN QUE YO LES VOY A DAR ES MI CARNE” (Jn 6,51)

“EL PAN QUE YO LES VOY A DAR ES MI CARNE” (Jn 6,51) 

--Acompañar en la participación del banquete eucarístico --

Seguimos en la parte final del ciclo de la catequesis infantil parroquial. Ya el I grupo, con todo lo que conlleva (catequesis a los papás y padrinos, la entrega de la documentación, las confesiones y los equipos de sanitización), ha celebrado la Primera Comunión en la alegría del tiempo pascual. Le toca ahora al II grupo, compuesto de 28 niños, vivir esta experiencia familiar el próximo sábado 1 de mayo, a las 12 horas, en nuestro templo parroquial.

En el artículo anterior se hablaba del objetivo de la iniciación cristiana que comienza con el bautismo, continúa con la Primera comunión y concluye con el sacramento de la Confirmación. Cada etapa tiene su propósito, el del primer año es “dar a conocer los principales acontecimientos de la historia de la salvación… y a sensibilizar gradualmente sobre la propia identidad como bautizado” (Directorio Para la Catequesis no. 240).

Asimismo, recordábamos que “con la catequesis de iniciación cristiana se apunta al primer conocimiento de la fe (primer anuncio) y con el proceso de iniciación se introduce al niño en la vida de la Iglesia y en la celebración de los sacramentos” (Ibid.). Por eso es muy importante que haya catequistas que acompañen a los catequizandos en este proceso de fe. De tal manera que la catequesis infantil no se improvisa, es todo un proyecto global.

Esto significa tener en cuenta las situaciones propias de los niños en su desarrollo. “La catequesis, no fragmentada, sino articulada a lo largo de un itinerario que propone de manera esencial todos los misterios de la vida cristiana y su impacto en la conciencia moral, también está atenta a las condiciones existenciales de los niños y a sus preguntas propias de la edad” (Ibid.). A esto se le añade lo importante que es tener en cuenta otros elementos:

“A lo largo del camino de iniciación, hay una enseñanza de las verdades de la fe que se fortalece con el testimonio de la comunidad, la participación en la liturgia, el encuentro con la palabra de Jesús en la Sagrada Escritura, el comienzo del ejercicio de la caridad” (Ibid.). Así se acompañará al catequizando en la participación del banquete eucarístico, experimentando la reconciliación comunitaria, la eucaristía dominical y el compartir el pan.  

P. Florentino Lucas Valdez, Párroco.

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